El Real Madrid logró una victoria convincente por 2-0 frente al Getafe, un resultado que les permite acercarse al liderato de LaLiga. La derrota del Barcelona contra Las Palmas había dejado a los culés en una situación delicada, y el Real Madrid no desaprovechó la oportunidad para presionar.
Con este triunfo, los de Carlo Ancelotti siguen a un solo punto del Barcelona, con un partido pendiente ante el Valencia, lo que les coloca en una buena posición para asaltar la cima de la tabla.
Estilos de juego diferentes
El encuentro comenzó con una notable diferencia en cuanto al estilo de juego de ambos equipos. El Getafe planteó un duelo físico, buscando frenar el ataque del Real Madrid mediante una presión constante y faltas estratégicas. A pesar de esto, los de Ancelotti dominaron la posesión desde el principio, aunque se encontraron con una defensa sólida del Getafe, que es uno de los equipos que menos remates concede en LaLiga.
El primer gol llegó a los 34 minutos del primer tiempo, gracias a un penalti claro cometido sobre Antonio Rüdiger tras un fuerte contacto de Nyom. El árbitro no dudó en señalar la infracción, y Jude Bellingham fue el encargado de ejecutarlo.
Con una mezcla de calma y precisión, Bellingham engañó al arquero David Soria con un remate a media altura que abrió el marcador a favor de los locales. Este gol fue el desahogo que necesitaba el Madrid, ya que hasta ese momento el partido se mantenía tenso y equilibrado, con pocas jugadas de peligro.
A partir de ese momento, el Real Madrid se mostró más seguro, y el segundo gol llegó poco antes del descanso. Kylian Mbappé, quien atraviesa una etapa algo irregular desde su llegada al club, aprovechó un pase filtrado de Bellingham para batir a Soria con un potente disparo desde fuera del área.
El gol, que llegó a los 42 minutos, demostró la calidad de Mbappé, quien, a pesar de sus dificultades con los penales y algunas jugadas fallidas en la Champions, sigue siendo una pieza clave para el Madrid. El equipo celebró el tanto con entusiasmo, respaldando al francés y mostrando el apoyo unánime que recibe de la afición merengue.
Bellingham sale por golpe
En el segundo tiempo, el Real Madrid perdió a uno de sus pilares: Bellingham, quien sufrió un golpe durante una jugada con el portero del Getafe, Soria. El mediocampista inglés dejó el campo con molestias, lo que obligó a Ancelotti a hacer un cambio, dando entrada a Coba. A pesar de la salida de Bellingham, el Madrid mantuvo el control del partido, aunque el Getafe se mostró más agresivo en los últimos 45 minutos, buscando al menos un gol que les diera esperanza.
El conjunto visitante tuvo algunas oportunidades claras. Primero, Uche, un jugador con gran capacidad física, remató al palo tras una acción en el área en la que estuvo muy cerca de marcar. Este disparo fue un aviso para los merengues, que, si bien dominaban, no lograban sentenciar el encuentro.
A medida que el partido avanzaba, el Getafe también estuvo cerca de hacer daño en varias jugadas a balón parado. Diego Rico, con un potente disparo desde fuera del área, estuvo cerca de sorprender a Courtois, pero su remate pasó junto al palo.
El Real Madrid, por su parte, tuvo varias ocasiones para ampliar su ventaja. Mbappé tuvo dos oportunidades claras, la primera en un mano a mano contra Soria tras un pase en profundidad de Valverde, pero el francés no logró concretar.
En la segunda, fue Modric quien asistió a Mbappé con un centro perfecto, pero el disparo de volea del delantero se fue bien despejado por el portero del Getafe. A pesar de estos fallos, el Madrid seguía siendo el equipo más peligroso.
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— Real Madrid C.F. (@realmadrid) December 2, 2024
Getafe Muestra Valentía
El Getafe también tuvo una jugada extraña en los últimos minutos del partido. John Patrick, quien ingresó como sustituto, remató con fuerza en el área, y el balón chocó contra el travesaño y luego en el poste.
Fue una acción rara, pero que mostró la mejoría de un Getafe que, a pesar de estar lejos de su mejor nivel, nunca dejó de luchar. No obstante, el Madrid resistió y logró mantener la ventaja.
El encuentro finalizó con el 2-0 en favor del Real Madrid, que, a pesar de las bajas importantes y la irregularidad en la Champions, sigue demostrando su potencial en la liga local. Este triunfo les deja a solo un punto del Barcelona, con un partido pendiente ante el Valencia, y les da un impulso anímico en su lucha por el título de LaLiga.
Por su parte, el Getafe sigue en una temporada difícil, sin lograr una victoria en los últimos partidos, pero con la esperanza de mejorar en las siguientes jornadas. Aunque no pudieron frenar al Real Madrid, los de Bordalás siguen siendo un equipo complicado de enfrentar, especialmente por su capacidad defensiva y su actitud combativa.
