Los Timberwolves de Minnesota no solo superaron a los Lakers en la primera ronda de los playoffs, también pusieron fin a una temporada llena de expectativas para LeBron James, Luka Doncic y compañía. Con un trabajo sólido en defensa y dominio físico en la pintura, el equipo dirigido por Chris Finch cerró la serie 4-1 al ganar el Juego 5 por marcador de 103-96 en el Crypto.com Arena.
Minnesota avanza por segunda temporada consecutiva a la siguiente ronda, algo inédito en su historia, y espera ahora al ganador de la serie entre Houston y Golden State. En cambio, para los Lakers, el panorama es totalmente distinto: otra eliminación prematura y más preguntas que respuestas en una plantilla que fue reconstruida a mitad de temporada.
Gobert Impone Condiciones Bajo El Aro
Rudy Gobert fue la figura indiscutida del partido y de la serie. El pívot francés jugó uno de los mejores partidos de su carrera en postemporada, terminando con 27 puntos, 24 rebotes y dos tapones. Dominó la pintura a placer, aprovechando que los Lakers decidieron jugar sin un pívot natural durante gran parte del encuentro.
Esa decisión táctica por parte de Los Ángeles se convirtió en una desventaja clara. Gobert no solo tomó rebotes ofensivos con facilidad, también generó segundas oportunidades y mantuvo a flote a los Timberwolves cuando el ataque exterior no funcionaba. Minnesota lanzó apenas 7 de 47 en triples, pero eso no impidió que tomaran el control del juego en los momentos clave.
Lo más impresionante fue que el dominio de Gobert se mantuvo constante durante todo el encuentro, con 15 puntos y ocho rebotes ya al descanso. Su presencia fue un problema sin resolver para los Lakers, que nunca pudieron contrarrestar su impacto físico ni en defensa ni en ataque.
LeBron Y Doncic No Logran El Milagro
La esperada dupla de LeBron James y Luka Doncic se quedó sin gasolina. A pesar de sus esfuerzos, ambos llegaron al Juego 5 con problemas físicos que limitaron su rendimiento en el tramo final de la serie. Doncic, en particular, sufrió una lesión en la espalda baja durante el segundo cuarto, aunque regresó a la cancha tras el descanso para intentar liderar la remontada.
El esloveno terminó con 28 puntos y nueve asistencias, siendo el máximo anotador del partido, pero se notaba su incomodidad al moverse. LeBron, por su parte, sumó 22 puntos, siete rebotes y seis asistencias, pero también mostró señales de fatiga física en el cierre del partido. Ambos lideraron una reacción en el tercer cuarto, donde los Lakers tomaron brevemente la ventaja, pero no fue suficiente.
Esta eliminación es un golpe duro para la franquicia angelina, que apostó fuerte al traer a Doncic desde Dallas en febrero. La idea era construir una pareja imparable junto a LeBron para competir de inmediato por el título.
Sin embargo, la química no terminó de cuajar y las lesiones jugaron un papel importante. El resultado fue otra salida temprana en playoffs, la cuarta en cinco temporadas desde el campeonato conseguido en 2020.
Minnesota Sobrevive a la Sequía de Triples
A pesar del pobre porcentaje desde el perímetro, los Timberwolves supieron mantener la cabeza fría. El equipo falló 17 triples consecutivos en un tramo que abarcó desde el segundo cuarto hasta bien entrado el último. Sin embargo, un triple decisivo de Mike Conley a falta de poco más de un minuto rompió esa racha y le dio el impulso final a Minnesota para cerrar el juego.
Anthony Edwards no tuvo su mejor noche en ofensiva, especialmente desde la larga distancia, donde terminó 0 de 11. Aun así, aportó en otras áreas del juego, sumando 15 puntos, 11 rebotes y defendiendo con intensidad en los momentos más apretados. También fue clave Julius Randle, que anotó 23 puntos y ayudó a mantener la ventaja en el primer tiempo.
La defensa también fue un punto fuerte. Minnesota logró controlar el ritmo del partido y obligó a los Lakers a tomar tiros incómodos. Incluso cuando los de Los Ángeles tuvieron una reacción y se adelantaron por un punto en el último cuarto, los Timberwolves respondieron con un parcial de 15-9 para sellar el partido y la serie.
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Un Futuro Prometedor Para Los Wolves
Con esta victoria, los Timberwolves avanzan a la segunda ronda por segundo año seguido, algo nunca antes visto en la historia del equipo. El proyecto liderado por Anthony Edwards y Rudy Gobert parece estar dando frutos, y la madurez del grupo ha quedado en evidencia en esta serie.
Ahora, Minnesota se prepara para enfrentar a quien salga vencedor entre los Warriors de Golden State y los Rockets de Houston, una serie que sigue abierta. Sin importar el rival, los Timberwolves ya han demostrado que pueden competir con cualquiera, incluso cuando sus estrellas tienen una noche difícil desde el perímetro.
Este triunfo no solo elimina a dos grandes figuras como LeBron y Doncic, también confirma que Minnesota ha dejado de ser una promesa para convertirse en una realidad. Un equipo que compite, que sabe adaptarse a las circunstancias del partido y que ha ganado confianza para pensar en algo más grande esta temporada.