Thunder de Oklahoma City sigue dejando claro que es un contendiente serio esta temporada. En una noche clave en el TD Garden, el equipo dirigido por Mark Daigneault logró una victoria importante ante los Celtics de Boston con marcador de 118-112. Más allá del resultado, el partido sirvió para demostrar el poderío de los Thunder y reafirmar su posición en la cima del Oeste.
Un Duelo de Alto Nivel en El Garden
Desde el inicio, el partido de NBA prometía ser un espectáculo. OKC arrancó con autoridad, anotando los primeros nueve puntos del juego y estableciendo el tono desde temprano. Boston, sin embargo, no tardó en responder, aprovechando su precisión desde la línea de tres puntos para mantenerse en la pelea.
Con Jayson Tatum liderando el ataque, los Celtics lograron igualar el marcador en varias ocasiones, pero nunca lograron tomar el control absoluto del encuentro. El equipo de Boston aún asi no buscaba rendirse tan fácil y trataron de dar la pelea durante todo el partido.
El duelo se mantuvo parejo hasta el último cuarto, cuando Oklahoma City encontró la manera de despegarse. Con el marcador empatado a 98, una racha de ocho puntos sin respuesta inclinó la balanza a favor del Thunder. Gilgeous-Alexander, con su característico juego eficiente, fue clave en este tramo, asegurando la ventaja con tiros decisivos y un dominio total del ritmo de juego.
Shai Gilgeous-Alexander, El Líder de la Noche, Dejando a Boston Sin Oportunidad Alguna.
Si hay un nombre que definió el partido, fue el de Shai Gilgeous-Alexander. El base canadiense firmó otra actuación brillante con 34 puntos, destacando su capacidad para anotar en momentos clave y liderar a su equipo en un escenario complicado. Con un 11 de 20 en tiros de campo y una precisión letal desde la línea de libres, SGA dejó claro por qué es uno de los jugadores más determinantes de la NBA en este momento.
A su lado, Chet Holmgren también tuvo un desempeño sobresaliente. El joven pívot sumó 23 puntos y 15 rebotes, consolidándose como una pieza fundamental para el equipo. Su presencia en la pintura fue clave para limitar el impacto de los Celtics y garantizar segundas oportunidades en el costado ofensivo.
Los Celtics, por su parte, tuvieron en Jayson Tatum a su mejor hombre. El alero estrella anotó 33 puntos y mantuvo a su equipo en la pelea hasta el final. Derrick White también aportó con 22 unidades, mientras que Al Horford tuvo un doble-doble con 18 puntos y 10 rebotes. A pesar de estos esfuerzos, Boston no encontró la manera de frenar la ofensiva de OKC cuando más lo necesitaba.
Uno de los factores que más influyó en la derrota de los Celtics fue su dependencia en el tiro exterior. Intentaron 63 triples en el partido, un récord de franquicia, pero la baja efectividad en los momentos decisivos les pasó factura. Aunque lograron mantenerse competitivos durante gran parte del encuentro, la diferencia en el cierre dejó en evidencia la superioridad de Oklahoma City en este enfrentamiento.
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OKC Asegura Su Lugar en Los Playoffs
Con esta victoria, los Thunder no solo consolidan su posición en la cima del Oeste, sino que también aseguran matemáticamente su presencia en la postemporada. El equipo ha mostrado una consistencia impresionante, ganando 17 de sus últimos 18 juegos y dejando claro que su ascenso no es casualidad.
Más allá del récord, lo que realmente llama la atención es la madurez con la que Oklahoma City está manejando la temporada. Con un plantel joven pero extremadamente talentoso, han encontrado una identidad basada en la intensidad defensiva, el juego colectivo y la capacidad de cerrar partidos complicados. Si logran mantener este nivel, no sería una sorpresa verlos peleando por el título en los próximos meses.
El mensaje del Thunder es claro: no son solo una promesa a futuro, sino una realidad en el presente. Con Shai Gilgeous-Alexander liderando el camino y un grupo que sigue evolucionando, Oklahoma City se perfila como uno de los equipos a vencer en la NBA.