Los Clippers de Los Angeles lograron una victoria emocionante en tiempo extra por 120-116 sobre los Jazz de Utah, en un juego que tuvo de todo: remontada, esfuerzo colectivo y jugadas decisivas de las estrellas del equipo. Norman Powell, con 41 puntos, se convirtió en la figura clave para los Clippers, mientras que James Harden también tuvo una destacada actuación, anotando 32 puntos, 10 rebotes y siete asistencias. El partido fue muy disputado, con los Clippers teniendo que remontar una desventaja de 20 puntos antes de conseguir la victoria en tiempo extra.
Una Remontada Épica
El partido comenzó con los Jazz dominando, especialmente desde el perímetro. Utah logró una ventaja de 50-30 en el segundo cuarto, gracias a su efectividad en los tiros de tres puntos, con 13 triples anotados en la primera mitad.
Sin embargo, los Clippers no se dieron por vencidos y, antes del medio tiempo, comenzaron a reducir la diferencia. Powell, quien estaba inspirado esa noche, anotó varias canastas consecutivas, lo que ayudó a que su equipo recortara la ventaja a 57-52 antes de irse al descanso.
La segunda mitad fue una lucha constante entre ambos equipos. Los Clippers lograron finalmente empatar el marcador en el cuarto cuarto, con un enceste de Powell que colocó a Los Angeles por encima 103-100. La gran defensa y un triple de Harden, acompañado de una bandeja de Powell, impulsaron a los Clippers a una ventaja en ese tramo final del juego.
Powell, El Héroe en Tiempo Extra/
El tiempo extra fue donde Powell realmente brilló, convirtiendo 9 de los 12 puntos de los Clippers en esos minutos adicionales. Aunque Utah mostró resistencia, con un canasto de Isaiah Collier y un robo de Svi Mykhailiuk que acercaron a los Jazz a solo un punto, Powell respondió con dos canastas consecutivas para sellar la victoria de los Clippers. Este par de canastas cruciales le dio a los Clippers una ventaja definitiva de 119-114 con 59 segundos restantes.
Además de la destacada actuación de Powell, James Harden también fue fundamental en el desarrollo del partido. No solo anotó puntos clave, sino que contribuyó en otras áreas, con 10 rebotes, 7 asistencias y 3 robos. Harden jugó 49 minutos, siendo el más destacado en cuanto a tiempo en la cancha. En su debut con los Clippers, Ben Simmons también dejó una buena impresión al aportar 12 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias, jugando un papel importante desde el banco.
Utah No Pudo Mantener la Ventaja
Por otro lado, Utah tuvo varias oportunidades de asegurar la victoria, pero no logró mantener su dominio. A pesar de la gran actuación de Kyle Filipowski, quien logró un récord personal de 20 puntos y 10 rebotes, los Jazz no pudieron sostener su ventaja en el tiempo extra.
Lauri Markkanen, quien también anotó 20 puntos, y John Collins, con 17, intentaron llevar a Utah a la victoria, pero las pérdidas de balón fueron un factor decisivo. Los Jazz cometieron un total de 26 pérdidas, lo que permitió a los Clippers capitalizar y anotar 20 puntos tras esos errores.
La derrota es un duro golpe para los Jazz, que no pudieron sumar una victoria en su segundo juego consecutivo. A pesar de sus esfuerzos, los errores en momentos cruciales les costaron caro. Ahora, Utah deberá concentrarse en mejorar su consistencia y evitar las pérdidas de balón si quiere mantener sus aspiraciones para los playoffs.
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Lo Que Sigue Para Ambos Equipos
Con esta victoria, los Clippers llegan al receso del Juego de las Estrellas con una racha ganadora de tres partidos. Este impulso, acompañado de la gran actuación de Powell y la integración de Simmons, será clave para lo que sigue en la temporada. Los Clippers seguirán luchando por mantenerse competitivos en la Conferencia Oeste y llegar lo más lejos posible en los playoffs.
Por su parte, los Jazz deberán corregir sus errores, especialmente en cuanto a la toma de decisiones en los momentos finales de los partidos. A pesar de su buena ofensiva, necesitarán mejorar en defensa y mantener su concentración durante los 48 minutos para conseguir victorias en partidos tan reñidos.
Este enfrentamiento, que estuvo lleno de emoción y jugadas determinantes, dejó claro que, en la NBA, cualquier cosa puede suceder, y los equipos deben estar listos para todo, tanto en los momentos buenos como en los difíciles.
