El Target Center de Minneapolis fue testigo de una de las derrotas más humillantes para los Lakers en los últimos años. En una noche en la que el equipo angelino nunca estuvo a la altura de su rival, los Timberwolves arrollaron 109-80 a los Lakers en un partido que, para los de Los Ángeles, será difícil de olvidar.
A pesar de contar con las estrellas LeBron James y Anthony Davis, los Lakers no lograron encontrar su ritmo, mientras que los Timberwolves aprovecharon la oportunidad para imponer su defensa y su juego colectivo.
Una Noche Difícil Para Los Lakers
El partido comenzó de manera preocupante para los Lakers, que no lograron encontrar la fluidez en su ofensiva desde el principio. Aunque D’Angelo Russell logró anotar 20 puntos, LeBron tuvo una de sus noches más difíciles de la temporada. El rey de la NBA apenas consiguió 10 puntos y falló 12 de sus 16 intentos de tiro, incluyendo una racha de 19 triples consecutivos fallados.
A su lado, Davis, que había brillado en otros encuentros, apenas logró 12 puntos y 11 rebotes, sin ser capaz de marcar la diferencia. La carga de minutos y los viajes de un huso horario a otro parecieron pasar factura a los Lakers, que no pudieron contrarrestar la presión defensiva de los Timberwolves.
Además, la falta de profundidad en la rotación de Los Ángeles también fue evidente, ya que jugadores como Austin Reaves y Jalen Hood-Schifino no estuvieron disponibles debido a lesiones. La defensa de los Lakers fue un desastre, especialmente en los momentos finales del juego, donde fueron superados claramente.
A pesar de algunos intentos por acercarse en el marcador, como la bandeja de LeBron para dejar el juego 79-66, los Lakers se vieron superados por una racha de 10-0 que sentenció el partido. Los errores defensivos y la falta de puntería hicieron que fuera imposible revertir el resultado.
El Dominio De Los Timberwolves Y La Destacada Actuación De Randle Y Gobert
Mientras los Lakers sufrían, los Timberwolves demostraron un juego sólido y efectivo. Julius Randle, quien fue uno de los líderes del equipo, anotó 18 puntos, mientras que Rudy Gobert dominó tanto en ataque como en defensa, sumando 17 puntos y 12 rebotes. Ambos jugadores, junto con Naz Reid y Nickeil Alexander-Walker, quienes añadieron 15 puntos cada uno, fueron claves en la victoria de los Timberwolves.
Aunque Anthony Edwards tuvo una actuación discreta, con solo 8 puntos y un pésimo 1 de 13 en triples, los demás miembros del equipo supieron aprovechar las oportunidades.
La defensa de los Timberwolves fue impresionante, limitando a los Lakers a solo 80 puntos, su peor marca en un juego desde 2017. Además, los Timberwolves aprovecharon bien las transiciones rápidas, sumando 20 puntos en contraataques, y fueron efectivos desde la línea de tres, encestando 15 de 35 intentos.
En comparación, los Lakers solo consiguieron anotar 6 de 31 tiros desde más allá del arco, lo que reflejó la falta de efectividad en su ataque.
great team win. ✅ pic.twitter.com/uWMCGQ4Nf6
— Minnesota Timberwolves (@Timberwolves) December 3, 2024
Un Golpe De Realidad Para Los Lakers
Esta derrota marca un punto crítico para los Lakers en lo que va de la temporada NBA. A pesar de que habían mostrado un rendimiento decente en los primeros partidos, esta derrota por 29 puntos ante un equipo como los Timberwolves pone en evidencia los problemas de los Lakers en términos de consistencia y cohesión.
La escasa contribución de sus estrellas, junto con las dificultades en defensa y ataque, plantean dudas sobre su capacidad para competir al más alto nivel.
Para los Timberwolves, esta victoria es un claro mensaje de que están listos para competir en la temporada. A pesar de las bajas de jugadores importantes, su juego colectivo y la buena forma de jugadores como Randle y Gobert les permiten mantenerse competitivos.
Con un récord de 10-10, los Timberwolves seguirán luchando por mantenerse en los primeros puestos de la conferencia, mientras que los Lakers tendrán que hacer ajustes importantes si quieren recuperar su nivel y aspirar a los playoffs.